sábado, 11 de abril de 2015

LAS "FRANQUICIAS DENTALES"

"HOLA MI  NOMBRE ES VALERIA Y QUIERO DENUNCIAR A VITALDENT POR MENTIR A LOS PACIENTES QUE VAN A INTENTAR ARREGLARSE LA BOCA . A MI ME TUVIERON 2 AÑOS CON UN TRATAMIENTO DE UN DIENTE ROTO ME COBRARON 900 EUROS Y DESPUES DE ESE TIEMPO ME DICEN AHORA QUE EL TRATAMIENTO A FRACASADO Y TENGO QUE VOLVER A HACER OTRO TRATAMIENTO  CON UN COSTE DE 2000 EURO Y NO QUIEREN RECONOCER EL ERROR ,ASI QUE YO  ME  LO TENDRE QUE  SOLUCIONAR  EL PROBLEMA, SOLO ME QUEDA ESPERAR QUE LA JUSTICIA OBRE  A FAVOR DE LAS PERSONAS QUE SOMOS IGNORANTES A ESOS FRAUDES  , AUNQUE EN LA TELE LO MUESTREN TODO MUY BONITO. CON ESTO SOLO ESCRIBO PARA QUE LA GENTE NO VAYA A ESOS CENTROS QUE MUESTRAN EN LA  TELEVICION ,  SON FRAUDES Y SOLO  TE SACAN EL DINERO ASI DE FACIL...."

Este comentario es tan desafortunado como cualquier otro comentario negativo que se pueda desprender de un paciente disgustado con su tratamiento dental.. Como odontólogo que he trabajado (y sigo trabajando) dentro de redes de clínicas "franquiciadas" (es necesario matizar que no todas lo son, aunque  usaremos este término para referirnos a aquellas que tienen una cantidad elevada de centros en España), puedo aseverar algo con toda seguridad: Pueden existir odontólogos mejores o peores pero no clínicas malas o con intención de estafar.

Vital Dent, Dentix, Unidental...etc son empresas considerablemente grandes con un gran número de clínicas dentales, principalmente en España aunque existen algunas en otros países. Algunas de estas clínicas son franquiciadas y otras pertenecen a la central de la empresa. 


Estas clínicas, en realidad, como cualquier otra clínica dental,  funcionan con odontólogos colegiados que son contratados para trabajar en ellas y por tanto son éstos últimos los responsables del diagnóstico y el tratamiento finalesSi el profesional que te atiende te explica correctamente el diagnóstico y te parece competente, deberías confiar en el profesional sin importar cómo se llame la clínica, si se anuncia o no en televisión o si la gente se queja de ellas alegremente.

La gran cantidad de clínicas y profesionales hace imposible que se pueda generalizar y supone un daño innecesario al nombre de la empresa. Véase el anuncio de arriba, esta paciente menciona a Vital Dent en general y la acusa de estafa. En definitiva, este paciente viene a decir que las casi 400 clínicas en España y los más de 3500 odontólogos son unos estafadores, lo cual es evidentemente algo completamente absurdo y sin sentido. Sería como decir que todos los perros que existen son malos porque uno te ha mordido.
Incluso dentro de las mismas clínicas hay varios profesionales, por lo que si no te convence el trato de determinado odontólogo resulta un error dejar el tratamiento a medias, ya que has perdido la confianza en el profesional pero NO en toda la clínica. Suele bastar con pedir cambiar a otro profesional disponible.

La generalización es siempre mala. El problema es que estas empresas son muy grandes e invierten considerablemente en publicidad. Ello también conlleva algo negativo: cuando el paciente no está contento resulta muy sencillo, cómodo y una forma de desahogo hablar negativamente de ellas, de forma generalizada cuando en realidad no son las responsables finales de su descontento. La responsabilidad es del odontólogo que ha diagnosticado y planificado el tratamiento, en última instancia.

Otro tema es que el paciente tenga o no razón en su queja. El fracaso en los tratamientos existe, como otras disciplinas, y como toda ciencia médica dista mucho de ser fiable al 100%. Por tanto, un fracaso en el tratamiento ntiene por qué implicar, ni mucho menos, una actuación incorrecta por parte del profesional.  Habría que valorar todo el proceso y las complicaciones del tratamiento que han derivado en la queja de más arriba ¿tiene el paciente realmente razón? es posible que incluso no, pero una queja así resulta muy catastrofista e infunde desconfianza de manera innecesaria en una red enorme de clínicas, lo cual no parece algo demasiado justo. Si esta persona hubiera sido razonable, quizás debería haber centrado sus quejas en el odontólogo o odontólogos que han realizado el seguimiento de su caso y haberse lamentado de que su tratamiento no haya funcionado. Pero criminalizar a un nombre corporativo resulta bastante surrealista. Por desgracia resulta demasiado común.

He colaborado en varias clínicas. Bien es cierto que pueden cambiar considerablemente en su organización interna en función de quién las dirige y cómo lo hace. Pero la premisa básica es siempre la misma: los diagnósticos y tratamientos siguen estando a manos de odontólogos colegiados que es, en definitiva, lo que realmente cuenta.

Estas cínicas han cogido relativa mala fama debido a su propia fama, valga la redundancia. Cualquier paciente disgustado, con o sin razón, tiene tendencia a caer en la grave generalización y todo tiene mucha más repercusión mediática debido a lo muy conocida que resulta cualquiera de estas redes de clínicas. Pero sin duda, las quejas que tiene Vital Dent, Dentix, Unidental, o cualquier otra  son las mismas que pueda tener cualquier otra clínica que no sea conocida. El problema es que en estos últimos casos las quejas no salen a la luz ni tienen tanta repercusión. El paciente en estos casos dice como mucho que la clínica en cuestión no le ha gustado, pero al tratarse de una clinica independiente poco conocida, su queja no tiene consecuencias en otras.

En definitiva, estas clínicas no dejan de ser una clínica dental más dentro de la oferta existente. El nombre y la fama de esta redes  de clínicas no debe usarse nunca como factor final para realizarse o no un tratamiento dental. Hay factores mucho más importantes que en definitiva se centran una vez más en la confianza en el odontólogo que te está atendiendo sin importar el nombre de la clínica donde lo hace. Por lo tanto, debes valorar principalmente que te guste el trato recibido por este profesional, que hayas comprendido perfectamente tu problema y el tratamiento planteado gracias a unas explicaciones correctas por parte del odontólogo y que el presupuesto se adapte razonablemente a tus posibilidades sin resultar innecesariamente abusivo.

No quisiera convertir esta entrada en una defensa a toda costa de las clínicas franquiciadas, ya que no sería del todo justo. El problema es que los pacientes contentos no se dejan ver y los descontentos se manifiestan con mucha facilidad, lo que provoca la falsa sensación de que todo el mundo que acude está descontento.
Los pacientes con quejas hacen demasiado ruido provocando una sensación errónea. O incluso critican de manera infundada sin haber pisado jamás una clínica de estas redes y dejándose llevar por críticas ajenas. 
De todas formas vuelvo a insistir: pese a llamarse bajo el mismo nombre, cada clínica es un mundo. Sería una osadía decir que todos las clínicas son maravillosas, probablemente también las habrá con doctores y personal de dudosa calidad humana y profesional. Pero también en otras clínicas "sin nombre" ocurre lo mismo, por lo que no tiene sentido criminalizar tan alegremente

Y qué ocurre con las ofertas "gancho" de bajo coste?? Aunque se trata quizás de una acción de márketing de dudosa ética por parte de estas empresas, al final no dejas de tener un presupuesto final que puede o no interesarte. Poner un precio bajo para atraer clientes cuando en realidad el precio "tiene truco" y en realidad es más elevado es una técnica usada en absolutamente todos los ámbitos comerciales. El  "precio desde..." no debería ser nunca tomado en serio.

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